VIAJA COMO ERES

BRASIL

tierra de samba y playas.

La ruta ideal comienza en Río de Janeiro, la "Cidade Maravilhosa. Dedica al menos 3-4 días para explorar sus icónicos lugares. No te pierdas el Cristo Redentor en el Corcovado y el Pan de Azúcar con sus vistas panorámicas. Pasa tiempo en las famosas playas de Copacabana e Ipanema y disfruta de la animada vida nocturna en el barrio de Lapa.

Desde Río, dirígete hacia el sur a lo largo de la Costa Verde. Esta región es un paraíso tropical con una naturaleza exuberante y aguas cristalinas. Tu primera parada podría ser Paraty, una encantadora ciudad colonial con calles empedradas y arquitectura preservada. Desde allí, puedes tomar un barco para explorar las islas cercanas.

Continúa hacia Ilha Grande . Esta es la isla más popular de la zona, conocida por sus playas vírgenes y senderos de trekking. No te puedes perder Lopes Mendes, considerada una de las playas más bellas de Brasil, y un tour en barco para visitar la Lagoa Azul.

Después de la Costa Verde, dirígete a São Paulo, la metrópolis más grande de Brasil. Aunque no tiene playas, la ciudad es un centro cultural y gastronómico. Explora el Parque Ibirapuera, visita el MASP (Museo de Arte de São Paulo) y sumérgete en la vibrante escena culinaria. Es el contraste perfecto con la tranquilidad de las islas.

Para experimentar la selva, la mejor opción es volar desde São Paulo a Manaos, la capital del estado de Amazonas. Desde allí, puedes reservar un tour o alojarte en un "lodge" en la selva. Estas experiencias suelen incluir caminatas para ver la flora y fauna, paseos en canoa por los ríos y la oportunidad de aprender sobre las comunidades indígenas. Esta es una parte fundamental para completar un viaje por Brasil, ya que muestra el lado más salvaje y natural del país.