MALDIVAS

Maldivas: un sueño hecho realidad sobre el Índico, donde atolones de coral, aguas turquesas infinitas y bungalows sobre el mar te esperan para una experiencia de serenidad inigualable. Sumérgete en un mundo submarino vibrante o relájate en sus playas de arena blanca, un paraíso que redefine el escape perfecto.

Desde Malé, la ruta te lleva a Thulusdhoo, una isla que es un auténtico paraíso para los surfistas. Aquí, las olas de Cokes y Chickens atraen a entusiastas de todo el mundo, ofreciendo rompientes de clase mundial. Pero Thulusdhoo no es solo surf; sus aguas claras también invitan al buceo, revelando arrecifes llenos de vida y la posibilidad de encuentros con tortugas marinas y tiburones de arrecife.

Continuando el viaje, Dhiffushi te ofrece una combinación perfecta de playas tranquilas y aventuras acuáticas. Si bien no es tan conocida por el surf como Thulusdhoo, sus aguas son ideales para el buceo y snorkel, con coloridos jardines de coral muy accesibles desde la orilla. Es un excelente lugar para relajarse después de la adrenalina de las olas.

Más al sur, Maafushi se ha consolidado como un centro vibrante para viajeros independientes. Desde aquí, las opciones de buceo son infinitas, con excursiones a impresionantes paredes de coral, pecios y puntos de limpieza de mantas raya. Para los surfistas, aunque la isla no tiene rompientes directos, se organizan fácilmente viajes en barco a spots cercanos.

Finalmente, no puedes dejar de explorar Fulidhoo, en el atolón de Vaavu. Esta pequeña joya es famosa por sus encuentros con tiburones nodriza en el buceo nocturno, una experiencia verdaderamente inolvidable. Sus arrecifes son prístinos, ideales tanto para el buceo como para el snorkel, y sus tranquilas playas te invitan a desconectar por completo.

Tu aventura en Maldivas comienza en Malé, la vibrante capital y puerta de entrada a este paraíso. Aunque es un centro urbano, te servirá como punto de partida para sumergirte en la verdadera esencia de las islas locales.